Coherencia, rigor, innovación, creatividad, aprendizaje, proactividad… Estas cualidades forman parte del ADN de IED desde su nacimiento a principios de los 90. Si volvemos al presente, Iñigo Ayerra, su CEO, sigue poniendo las miras en horizontes ambiciosos con el objetivo de llegar a dónde antes parecía imposible. Una filosofía de vida y de trabajo que busca transmitir a sus equipos, y que les ha permitido crecer de manera muy importante en los últimos años.
¿Cómo fueron los comienzos en IED?
IED Electronics es una PYME navarra y familiar (fue fundada por mi padre Francisco Ayerra), que nació a principios de los años 90 con la vocación de proveer a la industria de productos electrónicos ajustados a las necesidades particulares de cada segmento. En sus orígenes la empresa desarrolló fundamentalmente dispositivos electrónicos para grúas y displays de control de procesos fabriles. A partir del año 2000, IED fue diversificándose y creciendo para, a través del diseño y la fabricación de productos electrónicos, ofrecer hoy soluciones a prácticamente todos los sectores industriales: energías renovables, elevación, herramientas eléctricas, movilidad eléctrica, automatización industrial, maquinaria auxiliar de automoción, vending…
La empresa, con la base sólida que crearon mis padres, ha madurado, ha crecido y hoy tiene más de 80 trabajadores, con un marcado carácter internacional. Nuestra sede principal está en Pamplona, pero contamos con sedes fabriles y comerciales en India y China. Tenemos la suerte de haber crecido de manera sostenida durante los últimos años, y las previsiones para los próximos también son buenas.
IED en una sola palabra…
“Electronicity”, que es la capacidad de innovar que tiene la industria a través de la electrónica. Hoy en día estamos viendo cómo tecnologías como la Inteligencia Artificial, la robotización o la digitalización están teniendo un notable impacto. Sin embargo, para que estas tecnologías lleguen a cambiarnos realmente como sociedad es necesario que sean aplicables a escala, que lleguen a toda la sociedad. Y en este contexto es donde surge la oportunidad para aplicar electronicity, que en el fondo es situar a la electrónica como actor clave para canalizar esas innovaciones.
En todos estos años, seguro que tienes algún hito destacable.
En cuanto a hitos, el primero que destacaría es el desarrollo y la comercialización del RLG-EBA en 1998, que fue el primer producto de IED creado para el sector eólico, el cual hoy en día es muy relevante para nosotros. Posteriormente, en 2003 desarrollamos los primeros dispositivos de protección frente al viento para grúas torre (SAG 104 y SAG 105), que también tuvieron gran relevancia. En 2010 creamos la empresa IED Greenpower, centrada en iluminación para aerogeneradores, donde somos líderes mundiales. En 2012 dimos el salto a los sectores solar y agrícola gracias a la expertise adquirida en anemómetros. Otros dos años claves fueron 2015 y 2019, en los que abrimos filiales en India y China, respectivamente. Y por último, este 2021 hemos constituido IED Research & Technology, la Unidad I+D Empresarial de IED que tiene por objetivo fortalecer un modelo productivo con la innovación como piedra angular.
Respecto a productos, destacaría en primer lugar nuestro sistema de iluminación para el interior de aerogeneradores, donde somos especialistas a nivel mundial gracias a la gama de productos innovadores comercializados por nuestra unidad de negocio IED Greenpower. En segundo lugar, SAFE-OM, un sistema de seguridad para la operación y el mantenimiento de aerogeneradores. Sin coste añadido para el cliente, permite integrar en un único sistema todos los elementos de seguridad del aerogenerador. También es reseñable el sistema para el seguimiento solar de seguidores solares. Es un sistema innovador y robusto que comenzamos a desarrollar hace tres años y que ya están implementando alguno de los mayores fabricantes del mundo. Y por último, otro de reciente creación, ARCA, que es un generador solar autónomo que sirve para aportar electricidad a hogares que estén aislados eléctricamente. Son solo algunos de los productos de todos los que desarrollamos para múltiples sectores: construcción, automoción, solar, eólico, agrícola…
¿Qué claves os han hecho crecer como organización?
Creo que nuestro crecimiento se ha sustentado en una serie de factores: cultura empresarial, coherencia estratégica, equipo cohesionado, liderazgo… Y sobre todo ello pivota el rigor. Aquí hacemos las cosas sabiendo por qué las hacemos. Y una vez decidimos intentamos ejecutarlas con la mayor precisión posible para aportar excelencia.
Y si miramos al futuro, ¿sobre qué ejes estratégicos queréis crecer?
Básicamente, dos, que están muy relacionados. Primero, ser capaces de identificar de forma rápida nichos de mercado en los que seamos capaces de ofrecer una propuesta de especialista. Y segundo, atraer el talento necesario para llevar a cabo esa visión. Es decir, personas que nos permitan seguir avanzando.
Con una apuesta muy marcada por la innovación, ¿cómo se consigue que esta forme parte de la propia cultura de la organización, de sus personas y equipos?
Realmente, nosotros somos capaces de vender cuando hacemos algo diferente a lo que el cliente está comprando actualmente. Por tanto, solo hemos logrado ser competitivos a través de la innovación. Creo que el punto positivo es que la tenemos integrada en nuestro ADN, lo que nos ha permitido llegar al nivel de ofrecer soluciones proactivamente.
Aquí hacemos las cosas sabiendo por qué las hacemos. Y una vez decidimos intentamos ejecutarlas con la mayor precisión posible para aportar excelencia.
Iñigo Ayerra
¿Qué crees que hace única a IED y a sus personas?
Es difícil destacar uno solo, pero como decía anteriormente creo que el rigor es el que mejor nos define. Somos rigurosos en la estrategia, en los procesos, en las metodologías, en las validaciones… Para ser riguroso hay que ser exigente, saber reconocer errores, aprender de ellos, escuchar a otros, tener vocación de mejora… Y en IED somos así. Nos equivocamos mucho, pero sabemos que es el camino para ofrecer algo realmente bueno. Creo que ser rigurosos nos da consistencia como empresa.
Como CEO, ¿qué cualidades intentas transmitir a tu equipo?
Coherencia, rigor en los razonamientos, creatividad, aprendizaje del error y proactividad. Las considero cualidades relevantes para una empresa innovadora como la nuestra.
Para IED formar parte de la Fundación Industrial Navarra significa…
En primer lugar, nos permite formar parte del entramado de la industria, compartir experiencias y conocer cómo otros afrontaron y afrontan retos parecidos a los nuestros.
Además, para IED, ser miembros de Fundación Industrial Navarra es el camino más directo para conocer a las empresas relevantes e inquietas de la industria Navarra, con las que podemos colaborar y aprender. Y creo que esto es algo muy necesario en una comunidad con empresas pequeñas que tienen que competir en mercados globales.